Historia del Real ESPPOR Club

A pesar de que el color insigne del Real ESPPOR es el blanco, el verde predominó en la indumentaria de una institución que daba sus primeros pasos en la Segunda División hace ya tres años. Fundado a mediados de 2008 como producto de una serie de inquietudes de un grupo de empresarios venezolanos que creen en el fútbol venezolano, los hoy merengues arrancaron este sueño que, día a día, se afianza cada vez más dentro del sentir balompédico nacional.

En principio, el Real ESPPOR iba a ser el extinto Deportivo Galicia, institución con gran historia que tuvo la dicha de ser campeón en 1964, 1969, 1970 y 1974. Sin embargo, por disposiciones gerenciales, la idea de revivir al Galicia le dio paso a una nueva institución.

“Todo nació en un partido de frontón”, relata el presidente del club, Ricardo González. “Fue así como ‘Mon’ López me planteó la idea de formar un equipo de fútbol para revivir al Galicia. Acepté formar no un equipo sino un club, y bajo otra denominación. Fue así como nació el Real ESPPOR Club”.Con el surgimiento de la primera plantilla, nació también la Sub 17 y la Sub 20 blanca, avalando la idea de González de formar un club.

Fue el Galicia, con su cantera y con una camada de jugadores importante, la que pasó a formar parte del ESPPOR, representando a la entidad en los Torneos Interregionales Serie A.Otro de los motivos del surgimiento del Real ESPPOR fue la imperante necesidad que tienen los jóvenes jugadores de nuestro país de continuar con su carrera balompédica. Al culminar el fútbol colegial, ese talento tiende por un lado a perderse, mientras que los que deciden continuar, hacen carreras en otras instituciones. Así, el ESPPOR busca ser precisamente el trampolín de esos talentos que ven en el fútbol una forma y un estilo de vida.

AÑO I

Poco más de quince días demoraron los trámites de inscripción y formación de la plantilla blanca, verde en aquel entonces. El 16 de agosto de 2008, en el estadio Olímpico de la UCV y bajo la dirección del mítico Pedro Febles, el Real ESPPOR Club dio su primer paso, y de qué manera: con victoria por 2-1 ante Trujillanos, con goles de Alexis Chirinos y Luciano Roque.Ese primer paso fue presagio del éxito que se avecinaba, de la mano de un equipo de trabajo compuesto por grandes figuras históricas como el propio Febles, Rafa Santana, Pedro Acosta y José “Mon” López. Junto a ellos, el Real ESPPOR se nutrió de una plantilla con nombres destacados del balompié local.

Además del torneo de Segunda División, los blancos también dieron sus primeros pasos en la Copa Venezuela, certamen en el que destacaron al eliminar al campeón vigente, Aragua, además de hacer lo propio ante Monagas. El debut se dio el 28 de agosto de 2008 con victoria ante Cesarger (1-0), con gol de Rito Pérez. Sólo un año transcurrió para que el Real ESPPOR diera un paso de la categoría de plata a la máxima instancia, gracias al buen trabajo de todo un equipo y su junta directiva.Este éxito no fue el único. La categoría Sub 20, de la mano de Antonio Barbosa y Pedro Acosta, se llevó el Campeonato Interregional Serie A el 27 de junio de 2009, superando en la final al Deportivo Barinas. Así, las fuerzas básicas blancas le brindaron al Real ESPPOR el primer título de su corta historia.

Ese logro reafirmó que el proyecto blanco en Primera viene de la mano con el fútbol base, el futuro de una institución que nació para hacer historia.

AÑO II

Un segundo lugar en la acumulada de Segunda División fue el logro de una plantilla que, dirigida por Pedro Febles y Rafa Santana, obtuvo su ascenso a la máxima categoría, tras el retiro del Unión Atlético Trujillo, campeón del certamen. “Méritos para ascender tuvimos y por eso, la FVF avaló nuestro ascenso a Primera. Fuimos subcampeones absolutos y ese logro nos permitió alcanzar la máxima categoría”, sentenció el presidente del club, Ricardo González.

Este segundo año contó con la llegada de hombres como Ángel Chourio, Javi Campos, Luiryi Erazo, Antonio Boada y Heiber Díaz, quienes buscarían el objetivo principal del equipo: la permanencia.El 9 de agosto de 2009, en el Pachencho Romero y bajo la tutela del multicampeón Rafael Santana Fontes, el Real ESPPOR, debutó en Primera y lo hizo con victoria ante Zulia por 0-1, gracias al tanto del colombiano Jenaro Herrera.

Como si se tratara de un déjà vu, nuevamente los merengues daban un primer paso positivo en esta nueva travesía.El primer semestre arrancó de forma trepidante. Triunfos ante Anzoátegui y Yaracuyanos, además de un empate frente a Táchira en Pueblo Nuevo, colocaron al ESPPOR en los titulares de los principales medios. Luego, los resultados positivos dejaron de acompañar, generando la salida de Santana y abriéndole las puertas a Darío Martínez, quien cerró el Apertura y condujo el buque en el segundo semestre.

Los resultados en el Clausura bastaron para que el Real ESPPOR mantuviera la categoría, permitiéndole a la directiva trabajar en el nuevo proyecto, más ambicioso.La actuación en la Copa Venezuela fue más bien discreta. Una victoria ante La Victoria en la segunda fase le permitió avanzar a octavos, donde esperaba Deportivo Italia, verdugo de unos blancos que no pudieron, en ese momento, con la tropa de Eduardo Saragó.

AÑO III

Luego de un año en donde el objetivo de mantener la categoría se cumplió, llegaba la hora de reforzar a una institución cuyas ambiciones y proyectos crecían frenéticamente. La llegada de un cuerpo técnico cinco estrellas fue el arranque de todo, abriéndole las puertas a un grande del balompié venezolano como lo es Noel Sanvicente.

Junto a “Chita” también arribaron jugadores de relevancia en el fútbol criollo, entre los que se destacaron Javier Toyo, Daniel Benítez, José Luis Granados, Bremer Piñango, Rafael Castellín y Cristian Cásseres, entre otros. Todas estas piezas fueron clave para reforzar a la plantilla durante un primer semestre que arrojó resultados arrolladores, colocando al Real ESPPOR en el tope del Torneo Apertura.

A pesar de que los merengues cabalgaron la competición de manera providencial desde el día uno, la recta final fue complicada y llena de altibajos. Entre lesiones y mala fortuna transcurrieron las últimas cinco jornadas, en las cuales las derrotas ante Caracas y Táchira, además de los empates ante Carabobo y Trujillanos, lapidaron el sueño de un Real ESPPOR que se veía campeón.

Un gol de diferencia fue el saldo negativo que le quitó el título a los blancos en la última fecha para otorgárselo al “Carrusel Aurinegro”, equipo que, de la mano del colombiano Jorge Luis Pinto, celebró en el Olímpico de la UCV un certamen que, para muchos, merecieron los de “Chita”.

El segundo semestre trajo consigo la llegada de otros jugadores de renombre,  resaltando a los colombianos Jong Harold Viáfara y Mauricio Romero, además del eterno capitán Vinotinto Luis Vera y el argentino Darío Figueroa, ambos provenientes del Caracas. La idea era blindar un equipo que, tal y como sucedió durante el Apertura, partía como el gran candidato para ser campeón.

Los merengues no vivieron un arranque de competición óptimo, y tras conseguir una victoria, un empate y dos derrotas en los primeros cuatro cotejos ante Mineros, Zamora, Lara y El Vigía, los de Sanvicente perdieron un terreno que, a la postre, lucía prácticamente irreversible en su afán de coronarse campeones.

Ante esta realidad, la “mirilla” apuntaba hacia la fase previa de la Copa Santander Libertadores de América, instancia a la que podían arribar siempre y cuando el Caracas se coronara campeón del Clausura, considerando que el Real ESPPOR se apoderaría del segundo lugar de la tabla acumulada, puesto que le daba ese beneficio.

Nuevamente la suerte no estuvo del lado blanco, y es que en la jornada que podía confirmar a los de “Chita” en el concierto futbolístico internacional, el Zamora de “Chuy” Vera sorprendió a propios y extraños en el Olímpico, venciendo a unos “Rojos del Ávila” que se despidieron del título y sentenciaron a los blancos a la Liguilla Pre Sudamericana.

En esta competición el Real no tuvo suerte y terminó con las manos vacías. En la primera fase le tocó medirse al Carabobo FC, rival del que se deshizo sin mayores problemas, pero en la segunda se enfrentó a un Deportivo Anzoátegui que, en Puerto La Cruz, eliminó al conjunto de la capital y se quedó con el cupo directo a la Copa Bridgestone Sudamericana.

A pesar de que en Primera las cosas no salieron bien, el fútbol base y las categorías Sub 18 y Sub 20 vivieron una verdadera “luna de miel” con el éxito.

El Real ESPPOR Club se coronó campeón colegial absoluto en la Liga César Del Vecchio, la categoría Infantil B también se quedó con el título y la Sub 18 y la Sub 20 se consolidaron campeones nacionales juveniles, de la mano de Lino Parrella y Francesco Stífano.

Como plus, los de Parrella también se apoderaron de la Recopa Juvenil, y por si fuera poco los de Stífano consiguieron la clasificación a la Copa Santander Libertadores en su categoría, competición que se llevará a cabo en febrero de 2012 en Lima, Perú.